Una vez que entras en el mundo empresarial, tienes que verle la cara a muchos tipos de impuestos que debes de pagar. Por ello es importante estar al día con todos los papeles y mantenerse solvente. En especial por si llega a presentar una inspección sorpresa de los entes encargados, cosa que sucede más de lo que nos gustaría admitir.
En el presente artículo, nos centraremos en el IAE y en la importancia de sus inspecciones. De modo que puedas estar al tanto de qué se encarga esta organización. Además, por supuesto, te daremos algunos consejos para estar preparados para una inspección del IAE.
¿Qué es el IAE y por qué es tan importante?
Para entender de qué se encarga esta organización, debemos comprender a qué se refieren sus siglas. El IAE es el acrónimo de Impuestos de Actividades Económicas. Se trata de un tipo de impuesto que todas aquellas personas con un negocio que genere ganancias deben pagar.
Es por ello que el IAE funciona de manera nacional en toda España y les concierne tanto a las personas jurídicas, como a las personas físicas. Desde el primer momento en que tu empresa comience a generarte ganancias, debes presentarte ante el IAE para informarte acerca de la tarifa que te tocaría pagar.
Sin embargo, existen ciertos sectores laborales que se ven libres de tener que cancelar este tipo de impuesto. Allí entran todas las empresas pertenecientes al sector público y aquellas que paguen el impuesto sobre la renta de los no residentes.
Del mismo modo, aquellos que sean emprendedores autónomos se ven libres de cancelar este impuesto durante los primeros dos años de su negocio. No obstante, a partir del tercero, deben mantenerse al día con sus pagos.
¿Cómo enfrentar una inspección del IAE?
El organismo que representa al IAE suele hacer visitas a los negocios para realizarles inspecciones. De esta manera, ellos se aseguran de que el negocio en sí tenga todos los documentos y pagos en línea. Es por ello que hay que estar preparados en todo momento por si llega una inspección sorpresa de este organismo. A continuación, te daremos algunos consejos para que estés preparado.
Ten cerca siempre tus documentos empresariales
Es fundamental que tengas siempre contigo los documentos empresariales de tu negocio. Así como también, por supuesto, es importantísimo que todos ellos estén al día. Cualquier documento vencido puede representar para ti una multa de gran calibre. Incluso cuando seas tú quien vaya a ver al inspector, debes asegurarte de que tengas todo el papeleo necesario.
Mantente calmado y actúa seguro de ti mismo
Muchas personas se suelen dejar llevar por los nervios cuando se presenta un inspector en su negocio. Tienes que evitar en la medida de lo posible caer en esto y demostrar que estás calmado.
Al mantenerte seguro de ti mismo, todo estará bien. Además, esto te permitirá crear una confianza en la comunicación que estarás teniendo con el inspector. Lo cual dará una buena impresión, porque te hará ver como un empresario totalmente profesional.
Presta mucha atención a todo lo que dice el inspector
Por otro lado, es fundamental que escuches con mucha atención todo lo que te vaya diciendo el inspector. Este es otro de los motivos por los cuales debes mantener los nervios al margen. Ya que así podrás mantener toda tu concentración en la conversación.
Ten siempre presente que estás hablando con un representante del IAE y que todo lo que dice es importante. Dentro de la charla puede pedirte cambiar algunos papeles o firmar algunos documentos, de allí la importancia de prestarle atención.
Firma solamente cuando estés conforme con todas las pautas
Las inspecciones del IAE siempre suelen terminar con la petición de que firmes el acta de la misma. Eso sí, no debes hacerlo hasta que no estés conforme y claro con todas las pautas indicadas por el inspector. Si te quedaron dudas o no estás muy seguro de lo que debes hacer, pregunta antes de firmar.
Esto es importante porque, una vez que firme, se dará por culminada la inspección y no tendrás el chance de dar respuesta a tus preguntas. Así que calma todas las dudas que tengas antes de plasmar tu firma en el acta.
