Explorando los beneficios de ser una PYME innovadora

¿Eres propietario, diriges o trabajas en una pequeña empresa? Bueno, aquí va una buena  noticia. La innovación tiene ventajas únicas y distintivas. El concepto de la palabra “innovación” puede parecer intimidante, sin embargo, lo que es importante recordar es que no se trata necesariamente de pensar en la próxima idea de un millón de dólares o de lograr el dominio mundial.  Tampoco se trata de transformar radicalmente tu negocio, invertir mucho dinero o tener un departamento deslumbrante. Más bien, se trata de aprendizaje, ingenio, oportunidad, cambio y desarrollo para impulsar el crecimiento, todas las cosas que la mayoría de las PYME tienen en abundancia.

Durante las últimas décadas, el comercio mundial y los paisajes competitivos se han enfrentado a algunos cambios dramáticos. Como resultado, la innovación ha pasado de ser “la construcción creativa” de un emprendedor solitario, a convertirse en un proceso interactivo entre empresas y/o en colaboración con instituciones creadoras de conocimiento. El modelo de “innovación abierta” sugiere que las empresas deben combinar ideas y tecnologías internas y externas para acelerar el proceso de innovación y desarrollo de nuevos productos como una vía más eficaz hacia el mercado.

En las economías basadas en el conocimiento, las PYME se ven cada vez más como una fuente clave, un motor de innovación y nuevas tecnologías. Sin embargo, la investigación ha demostrado continuamente que de la población total de PYME, solo una fracción es responsable de la mayor parte de la innovación, el desarrollo de nuevos productos, la I + D, la exportación y, por tanto, la creación de empleos y riquezas.

Incluso entre las empresas innovadoras, solo una pequeña proporción tiene el deseo, la capacidad y la oportunidad de perseguir activa y exitosamente el crecimiento, la expansión y la diversificación más allá de su mercado interno. En general, las PYME, carecen de la capacidad de absorción interna necesaria y del acceso a la tecnología, el conocimiento y la financiación de externos necesarios para desarrollar y diversificar su cartera de productos, invertir en I + D y buscar oportunidades de comercialización e internalización.

Se ha argumentado que los beneficios de ser una PYME innovadora tienen un amplio espectro de oportunidades potenciales para mejorar significativamente el desempeño. Las prácticas de innovación abierta, por ejemplo, pueden ofrecer estrategias alternativas y más viables mediante las cuales las PYME orientadas al crecimiento pueden acceder a recursos interempresariales a un costo menor, abordando obstáculos como los recursos tecnológicos, financieros y humanos que obstaculizan el desarrollo de nuevos productos y la capacidad para entrar en nuevos mercados.

Además, la innovación abierta podría emitir un mayor acceso a la información, las tecnologías y las instalaciones de laboratorio que podrían llevar años y requerir una importante inversión en I + D para adquirirlas internamente. Entonces, ¿cómo obtener el sello de Pyme Innovadora?

Hay tres formas generales a través de las cuales las PYME pueden participar en la innovación abierta: Procesos entrantes, salientes y acoplados. El proceso de innovación abierta entrante (de afuera hacia adentro) implica la adquisición y transferencia de tecnologías, ideas y conocimientos externos a la empresa a través de, por ejemplo, contratos de I + D, colaboraciones universitarias y licencias internas. Mediante este proceso, las PYME pueden utilizar tecnología desarrollada en otros lugares para llenar las carencias tecnologías que puedan existir. Y como la tecnología adquirida ya ha sido probada, puede aumentar tanto la velocidad como la calidad de la actividad innovadora.

El proceso de innovación abierta saliente (de adentro hacia afuera) implica la transferencia de tecnología, ideas y conocimientos a empresas externas y su explotación comercial mediante la venta de la idea o invención innovadora, la concesión de licencias externas y la creación de empresas emergentes. Este proceso permite a las empresas cosechar los beneficios de las ideas o invenciones innovadoras en la etapa inicial y de concepción, en lugar de intentar avanzar y traducir la idea en nuevos productos.

En el proceso acoplado, las empresas combinan las actividades entrantes y salientes para desarrollar, comercializar y capitalizar conjuntamente la innovación, compartiendo riesgos y beneficios con otras empresas. Si las PYME aplican la innovación abierta a través de la colaboración con socios externos, pueden compensar la falta de recursos y competencias internas, y así, acceder a una gama más amplia de oportunidades de mercado.

La independencia y la autonomía son rasgos admirables de los empresarios, no obstante, el deseo de mantener el control puede inhibir el desarrollo de la empresa, particularmente cuando se traduce en subcapitalización. Las empresas que operan de forma aislada son generalmente menos emprendedoras y menos orientadas al crecimiento que las que adoptan una postura más orientada hacia el exterior. La motivación y aspiración de los emprendedores, su capacidad de gestión y los recursos de capital humano son condiciones previas y prerequisitos en las PYME para explorar prácticas de innovación abierta y su implementación exitosa.

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